Definitivamente, somos lo que comemos. Si lo que ingerimos determina la calidad de nuestra vida, determina también la calidad de nuestro pelo. El cabello es un órgano vivo que necesita unos nutrientes básicos para lucir vigoroso. Esos nutrientes los va a adquirir, principalmente, del torrente sanguíneo, de los capilares que alimentan el bulbo. Vamos a repasar algunos de los alimentos que más contribuirán a que tengas un pelo fuerte y sano.
Comenzamos por un clásico imprescindible en cualquier dieta que se precie: los lácteos. Los beneficios de los lácteos (leche, yogures, quesos) sobre tu cabello son visibles desde el primer momento. Evitan que el pelo se quiebre y se abran las puntas.
Los lácteos casan perfectamente con nuestro segundo ganador: los frutos secos. Ricos en vitamina B y en zinc, te ayudarán a prevenir la calvicie. Con nuestros dos primeros aliados ya podemos construir nuestro desayuno o merienda.
El aporte proteico para tu pelo lo puedes buscar en carne y pescado, fundamentalmente. La proteína de pollo, pavo y conejo súper recomendable para nuestro cuero cabelludo. Del pescado, los ácidos omega3, presentes en grandes cantidades en el salmón darán elasticidad, firmeza y brillo a nuestro pelo.
Las verduras, y en especial las espinacas, son elementos clave en la oxigenación de tu cuero cabelludo. Ayudan a mejorar la circulación y a evitar la caída del cabello.
Las frutas cítricas estimulan la producción de colágeno y, por lo tanto, un crecimiento más rápido del cabello y mucho más resistente.
En cuanto a los cereales, el gérmen de trigo es idóneo para cabellos teñidos y castigados con coloraciones y decoloraciones frecuentes. Al estar compuestos de fibra, ayudan a las cutículas capilares y a restaurar de la raíz a la punta.
Otro imprescindible es el huevo. La clara de este alimento aporta una gran cantidad de hierro y proteínas que fortalecerán tu cabello.
Además, haremos referencia a otro de esos alimentos comodín por la gran cantidad de propiedades que ofrece para cualquier asunto que tratemos pero que, en el tema que nos ocupa, es un auténtico todo terreno: el aguacate. El aguacate es una fruta carnosa y grasa con gran variedad de vitaminas y minerales adecuados para suavizar y fortalecer tu melena. No es de extrañar que muchos de los productos que usamos los profesionales de centros capilares tengan como base el aguacate.
Y, finalmente, hablaremos de las legumbres, ideales gastronómicamente en las fechas que estamos pero que, además, son muy recomendables si tu cabello es débil y se cae con facilidad. Las lentejas, judías y habas son las que brindan mejores resultados.
En resumen: la alimentación saludable puede mejorar el aspecto de nuestro pelo, evitar la aparición temprana de patologías relacionadas con la piel y mejorar en general nuestro cuero cabelludo desde el interior y hacia el exterior. Tanto para seguir una dieta saludable como para cualquier tratamiento que tengas en mente realizar debes hacerlo bajo el control y asesoramiento de un especialista endocrino o nutricionista y no olvides que comemos para vivir, para vivir mejor.